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Skulls and skeletons are popping up in stores around Chicago, but they’re not your typical Halloween fare. Look closely and you’ll see them paired with colorful flowers, dressed as bride and groom, or made from sugar with intricate designs. These are representations of a popular celebration in Mexico and other parts of Latin America called Day of the Dead.

Unlike Halloween, Day of the Dead is not meant to be a sad or frightening holiday, but an uplifting time to remember loved ones who have died.

“Day of the Dead is a very sacred day. It’s a day in which we welcome back the memory and the souls of those people who are still — are still — an important part of our family, even though they many not be physically present,” Cesareo Moreno, chief curator at Chicago’s National Museum of Mexican Art, told the Tribune in 2015. “And it’s a sacred day in which a lot of people pray. They gather together. We welcome them back. Halloween, you don’t want those ghosts around. You’re kind of afraid of them. It’s a scary time. It is certainly not a sacred day, and I think those are the big differences between the two.”

The celebration is from Oct. 31 to Nov. 2. Souls of children are believed to visit the Earth Oct. 31 to Nov. 1 and adults, Nov. 1 and 2. The Catholic holidays, All Saints Day (Nov. 1) and All Souls’ Day (Nov. 2) take place during this time.

Customs vary, but can include standard Catholic rituals — including attending Mass and praying for the dead with rosary beads — and folk customs — including cleaning and adorning grave sites of dead loved ones and constructing home altars in their honor.

In Latin America, Day of the Dead customs are passed down from generation to generation, but the celebration is a relative newcomer in the U.S. Activists in California began to organize Day of the Dead processions and altar exhibits in the 1960s and ‘70s as a way to honor Mexican-American heritage. And more recently, Day of the Dead products are popping up at stores like Wal-Mart, Target, and Crate and Barrel.

The altar is one of the most distinctive ways Day of the Dead is celebrated. An altar is made in honor of the deceased and can be displayed at a grave site or in the home. Offerings of food, beverages and prized possessions are displayed.

“The altar is a good example of the fusion of both religions and cultures,” said Eric Garcia, Arte Ambulante coordinator of the National Museum of Mexican Art. “These altars pay respect to both the indigenous and the Catholic beliefs of the afterlife and situates them logically.”

  • The base: An altar can be built using tables, shelves or crates. The order of the three levels references Catholic and indigenous beliefs.
  • Lower level: Symbolizes Mictlan (the Aztec underworld of the dead).
  • Middle level: Represents Earth (where people live).
  • Top level: Symbolizes Heaven (where God and the saints live).

On the different levels of the altar, offerings or gifts are placed, usually including favorite items of the deceased intended to honor and welcome them back home.

  • Incense (incienso): Made of copal, which is pine resin, and used to communicate with the spirit world.
  • Marigold (flores de cempasuchil) flowers: Orange color and penetrating aroma lure heavenly souls to Earth. Petals are sprinkled on the floor leading to the altar to guide the souls to it.
  • Bread for the dead (pan de muerto): A sweet treat for the spirits. Design on top is meant to look like skull and crossbones.
  • Food (comida): Includes a deceased loved one’s favorite items to eat and represent the Earth element.
  • Water (agua) and other drinks (otras bebidas): Quench the thirst of the spirits who are believed to travel to Earth for one day.
  • Candles (velas): Represent the element fire and attract the spirits to the altar.
  • Paper banners (papel picado): Intricate crepe paper cutouts represent the wind and fragility, and are used as decorations for festive occasions throughout the year. Include images of skulls for Day of the Dead.
  • Photos and possessions (fotos y otros objetos): Photos of the deceased, as well as personal possessions are included to remember loved ones who have passed away.
  • Skull (calavera): In the form of puppets, toys, candy made of sugar or little figurines acting out scenes of daily lives (working, marrying, singing), skull art is a reminder of life’s brevity and the inevitability of death.
  • Catrina (la catrina): A female skeleton figurine wearing a wide-brimmed hat and dress common for upper class Mexican women in the late 1800s and early 1900s. This style satirizes those who favored European culture over Mexican foods and customs. Popularized in graphic images by artist Jose Guadalupe Posada.

Calaveras y esqueletos adornados con flores coloridas, vestidos de novios o hechas de azúcar con diseños extravagantes: Así son las representaciones del Día de los Muertos, una tradición en México y Latinoamérica.

Al contrario que Halloween, el Día de los Muertos no es para sentir miedo o tristeza, sino un momento para recordar a los seres queridos que ya partieron.

“El Día de los Muertos es algo muy sagrado. Es un día en el que damos la bienvenida a la memoria y las almas de aquella gente que de alguna manera siguen entre nosotros como parte de nuestra familia, a pesar de que físicamente ya no están con nosotros”, señaló Cesáreo Moreno, curador jefe del Museo Nacional de Arte Mexicano (lee la historia completa aquí.). “Y es un día sagrado en el que mucha gente reza. Se reúnen y les dan la bienvenida. En Halloween no queremos que esos fantasmas te ronden. Como que les temes. Es un día para asustar. En definitiva no es un día sagrado y creo que esas son las grandes diferencias entre ambas celebraciones”.

La celebración es del 31 de octubre al 2 de noviembre. Se cree que las almas de los niños visitan la tierra entre el 31 de octubre y el 1 de noviembre, y que los adultos lo hacen entre el 1 y el 2 de noviembre. La celebración católica para el Día de Todos los Santos (el 1 de noviembre) y el Día de Todas las Almas (el 2 de noviembre) ocurre durante este tiempo.

Las costumbres varían, pero pueden incluir rituales católicos tradicionales — como ir a misa y rezar un rosario a los muertos — y tradiciones populares — como limpiar y adornar las tumbas de los seres queridos o instalar altares en casa para honrarles.

En Latinoamérica las tradiciones por el Día de los Muertos se pasan de generación en generación, pero en Estados Unidos esa celebración es relativamente nueva. En California, algunos activistas comenzaron a organizar procesiones y exposiciones de altares con motivo del Día de los Muertos en las décadas de los 60 y 70 como una manera de honrar la herencia mexicoamericana. Más recientemente, los productos relacionados con el Día de los Muertos comenzaron a aparecer en tiendas como Wal-Mart, Target y Crate and Barrel.

El altar es una de las formas más singulares para celebrar el Día de los Muertos. Un altar se hace en honor a los fallecidos y puede instalarse en una tumba o en la casa. Se hace con comida, bebida y las cosas que más apreciaba el fallecido. “El altar es un buen ejemplo de la fusión entre religión y cultura”, dijo Eric García, coordinador de Arte Ambulante en el Museo Nacional de Arte Mexicano. “Estos altares rinden tributo tanto a las creencias indígenas como a la católica para la vida después de la muerte y lo ubica de forma lógica”.

Las ofrendas o regalos se colocan en los diferentes niveles del altar, y por lo general son cosas para honrar y dar la bienvenida de vuelta a casa del espíritu del ser querido que falleció.

  • Incienso: Está hecho de copal, que es resina del pino, y se utiliza para comunicarse con el mundo espiritual.
  • Flores de cempasúchil: De color naranja y olor penetrante, guían a las almas desde el paraíso hasta la tierra. Se esparcen pétalos en el piso para dirigir las almas hacia el altar.
  • Pan de muerto: Un regalo dulce para el espíritu. El diseño en la parte superior simula calaveras y esqueletos.
  • Comida: Se incluyen los platillos favoritos del fallecido para que los deguste y representa el elemento terrestre.
  • Agua y otras bebidas: Saciar la sed de los espíritus que se cree viajan a la tierra por un día.
  • Velas: Representan el fuego para atraer los espíritus hacia el altar.
  • Papel picado: Es papel de china con diseño complejo que representa el viento y la fragilidad, y es utilizado como decoración para ocasiones festivas durante el año. Incluye imágenes de calaveras para el Día de los Muertos.
  • Fotos y otros objetos: Fotos del difunto y objetos que le pertenecían se incluyen par recordar al ser querido.
  • Calavera: En forma de marionetas, juguetes, dulce o figurines que representan la vida diaria (trabajo, matrimonio, cantantes), el arte de las calaveras es un recordatorio de la fugacidad de la vida y la certeza de la muerte.
  • La catrina: Es un esqueleto que porta sombrero de ala ancha y ataviado comúnmente con ropa femenina de la alta sociedad mexicana de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. El estilo satiriza a quienes favorecían la cultura europea por encima de la comida y tradición mexicanas. Fue popularizada en imágenes por el gran ilustrador mexicano José Guadalupe Posada.

Sources: Eric Garcia, Arte Ambulante coordinator, the National Museum of Mexican Art; “Day of the Dead in the USA,” by Regina M. Marchi; Smithsonian Latino Center; Epicurious; Tribune reporting

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