Este viernes por la mañana Virgin Hotels Las Vegas, ubicado fuera de la franja de casinos o Strip, se convirtió en el objetivo de la primera huelga a gran escala del Sindicato de Trabajadores Culinarios Local 226 en más de 22 años cuando unos 700 empleados no relacionados con el sector de juegos y apuestas abandonaron sus puestos de trabajo.
Filas de protesta se iniciaron inmediatamente en todas las entradas del hotel-casino de 1,500 habitaciones poco después de las 5 a.m. Las negociaciones fracasaron el jueves por la tarde cuando el sindicato y la gerencia no llegaron a un acuerdo sobre un nuevo contrato de varios años.
La huelga se produce una semana antes del Gran Premio de Fórmula Uno Las Vegas. Virgin, que se encuentra a menos de una milla al este de Grand Prix Plaza, tiene varios acuerdos de patrocinio con dicha carrera de autos.
La Culinaria y su filial Bartenders Local 165 han estado negociando un nuevo contrato de cinco años con JC Hospitality, propietario de Virgin. El acuerdo anterior expiró el año pasado.
Líderes sindicales indicaron que la compañía se ha negado a ofrecer aumentos comparables a los de otros hoteles fuera del Strip y del centro de Las Vegas, citando a The STRAT Hotel, Casino and Tower, que este año dio a sus trabajadores sin propinas $4 dólares por hora en aumentos salariales.
El sindicato indicó en un comunicado que Virgin, en comparación, sólo ofreció a los trabajadores un aumento salarial calculado en 30 centavos al año durante cinco años después de deducir montos por beneficios.
El Secretario Tesorero de la Culinaria, Ted Pappageorge, dijo que, teniendo en cuenta que el costo de la vida ha aumentado drásticamente en los recientes dos años, la cifra fue “una auténtica bofetada en la cara”.
“La idea de que una empresa de inversionistas privados adinerados pueda decidir venir y destruir los estándares de Las Vegas … estos trabajadores no lo van a tolerar, y nosotros no vamos a tolerarlo”, agregó Pappageorge.
Tim Mckeever, quien ha trabajado en Virgin durante más de 20 años desde que esa propiedad era conocida como Hard Rock Las Vegas, comentó que él ha empezado a buscar empleo en otros casinos y hoteles en caso de que la huelga no sea exitosa.
Mckeever, de 45 años, agregó que, como trabajador que recibe propinas, gana “bastante bien”, pero le preocupan las condiciones laborales de los empleados que no obtienen propinas.
El trabajador calculó que ha tenido más de 15 gerentes durante su tiempo en Virgin.
“Todos los demás empleados que no reciben propinas están sufriendo”, dijo Mckeever. “Están muy por debajo del resto de la economía”.
Con el aumento en los precios de alimentos y vivienda, la trabajadora del área de limpieza de habitaciones Maria Mendoza, de 57 años, dijo que su salario de casi $20.65 dólares por hora simplemente no es suficiente.
“Todo ha subido, menos nuestros salarios”, planteó Mendoza. Si las negociaciones fracasan después de la huelga, ella dijo que planea dejar su trabajo en Virgin.
En un comunicado este jueves, Virgin reiteró sus comentarios de la semana pasada acerca de que buscó “adelantar una parte del aumento salarial que se propuso anteriormente para los años cuatro y cinco [del contrato] para que no haya cero aumentos en los primeros tres años.
“Una vez más, el sindicato decidió entablar una negociación tipo ‘tómelo o déjelo’, negándose a abandonar una posición que sabe que no es económicamente viable para nuestra propiedad fuera del Strip y que afectaría negativamente a todos los miembros del equipo del hotel”.
La huelga iniciada este viernes surge después de una serie de acuerdos exitosos con los principales centros turísticos del Strip, incluida la sindicalización completa del Strip de Las Vegas en septiembre, cuando el gremio ganó un aumento salarial del 32 por ciento para casi 35,000 empleados en cinco años.
En mayo, funcionarios de Virgin anunciaron que presentaron una queja contra la Unión Culinaria ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales, alegando que estaban participando en prácticas laborales injustas.
Poco después, los sindicatos culinarios y Bartenders realizaron una huelga de 48 horas en Virgin Hotels para llamar la atención sobre el estancamiento de las negociaciones contractuales.
Mendoza y otros trabajadores dijeron que no tienen sentido las declaraciones de Virgin en cuanto a que no puede sostener aumentos, agregando que Virgin Hotels Las Vegas es propiedad de grupos de capital privado que tienen más de $11 billones en activos y Fengate, uno de los inversionistas en activos y capital de crecimiento más activos de Norteamérica.
“La mayoría de las empresas no pueden encontrar dinero cuando están negociando, pero cuando están preparadas para gastar un billón de dólares, hay suficiente dinero”, dijo Pappageorge.
