Clic.
Ese sonido indicó que era hora de cambiar de escena durante la clase de improvisación de Positively Arts hace unos días.
Los hermanos Atticus y Emerson fueron los siguientes. Ambos hicieron el papel de narrador y de un gorila en un documental sobre la naturaleza. Su parodia provocó risas entre sus compañeros antes de que su instructora, DeLee Lively-Torti, volviera a hacer “clic” en su imaginario control remoto de televisión.
El ejercicio mantuvo a la clase atenta mientras pensaban qué escena representarían a continuación para entretener a sus compañeros y a Lively-Torti antes de que ella cambiara de canal.
La improvisación es una de las materias optativas que se ofrecen en Positively Arts, un estudio de artes escénicas y una organización sin fines de lucro ubicada en el Strip o franja hotelera de Las Vegas, que ofrece educación artística para estudiantes desde jardín de niños hasta el 12.º grado que toman clases en casa.
El programa Enriquecimiento Artístico Artist Clubhouse de la organización sin fines de lucro permite que esos estudiantes participen en clases optativas de arte, mientras que el programa de microescuela Positively Leaders incluye clases de matemáticas, ciencias sociales, Artes del Idioma Inglés, español y negocios, además de materias optativas de arte impartidas por profesionales de la industria.
Pilita Simpson, fundadora y directora ejecutiva de Positively Arts, dijo que esas materias básicas y clases de habilidades para la vida están integradas en todas las clases de arte que ofrece su organización.
Simpson inició Positively Arts hace unos 10 años como una solución para familias que buscan alternativas a las escuelas públicas, chárter y privadas.
Positively Arts combina la pasión de Simpson por las artes, la educación y el desarrollo infantil. Después de graduarse en la Universidad de Harvard con una maestría en educación, Simpson trabajó en el diseño del plan de estudios para Sesame Workshop, la empresa detrás de Plaza Sésamo. También trabajó como vocalista profesional para Disney y ha actuado en el Strip.
“Si tomas una clase de canto con nosotros, no solo te vamos a enseñar a cantar”, dijo Simpson. “Te vamos a enseñar a iniciar tu propio negocio, a ser emprendedor y a hablar con seguridad”.
Positively Arts es solo un ejemplo del continuo interés en la opción de microescuela, que tuvo un despegue después de la pandemia a medida que muchas familias buscaban alternativas educativas ante el cierre de las escuelas.
Las microescuelas se refieren a pequeños entornos de aprendizaje de entre 16 y 150 estudiantes, indicó Don Soifer, cofundador y director ejecutivo del Centro Nacional de Microescolarización en Las Vegas.
Positively Arts actualmente brinda servicio a menos de 40 estudiantes educados en casa. Las tarifas mensuales del programa de microescuela Positively Leaders van desde $250 dólares por un día por semana a $880 por cinco días a la semana. El programa Artist Clubhouse puede variar de $50 por medio día a $550 por mes por tres días completos a la semana. Hay becas disponibles.
Positively Arts currently serves less than 40 homeschooled students. The monthly rates for the Positively Leaders microschool program range from $250 for one day per week to $880 for five days a week. The Artist Clubhouse program can range from $50 for a half day to $550 a month for three full days a week. Scholarships are available.
La hija de Destyny Martinez, Lily, de 8 años, había asistido a una escuela Montessori antes de llegar a Positively Arts hace más de un año. La madre de familia dijo que nunca quiso que Lily tuviera que ir a una escuela pública con grupos numerosos donde pudiera perder el hilo de las clases. Martinez ve las microescuelas como un buen punto intermedio entre la educación en el hogar y una escuela presencial.
“Quería que ella tuviera la oportunidad de conocer a sus maestros y a sus compañeros … para desarrollar esas habilidades de liderazgo en lugar de que simplemente le dijeran qué hacer y cuándo hacerlo”, comentó Martinez.
En Positively Arts, Martinez señaló que Lily puede interactuar durante sus clases con estudiantes más grandes y que está motivada para seguirles el ritmo.
Simpson agregó que espera que el enfoque de Positively Arts pueda generar de manera natural el amor por el aprendizaje.
“No hay presión para que alguien aprenda una cierta cantidad de material en un tiempo determinado”, dijo Simpson. “Simplemente abrimos la puerta y el niño entra y lo apoyamos según el nivel de su aprendizaje”.
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